Última prueba del GMTA de este año, esta vez en tierras de Ourense, y con la incertidumbre de cómo sería el recorrido, pues anunciaban que sería distinto de la habitual, que habría sorpresitas, y que no tendría mucho desnivel. Y fue cierto, pues vimos varias partes diferenciadas. La primera sencilla y rápida, casi plana al inicio y después en bajada, nos sacaba de Boborás por caminos entre fincas y pistas fáciles, tanto de tierra como de asfalto (demasiado tal vez). Aquí todavía íbamos bastante agrupados, y se le daba zapatilla al asunto; yo guardaba porque pensaba que aunque la carrera fuese corta el final se podría hacer durillo.<
Al empinarse la bajada por cemento y piedra nos avisaban de que llegábamos a Pazos de Arenteiro (donde salió la del año pasado), y con ello al valle y al río. Primero caminos de pescadores en sube-baja, después rocas resbaladizas, y encontramos las primeras rampas fuertes metidos de lleno en la tierra del bosque, aunque todavía teníamos que bajar otra vez a probar nuestra técnica en el río. En esta zona que tanto me gustó, ¡me picó una abeja!; por suerte no me hacen nada, sólo el dolorcillo del momento. Aquí el ritmo se redujo y tocó caminar a ratos, pues el terreno era unos momentos peligroso y otros inclinado y con obstáculos.
Un poco más subiendo (¿o era un mucho?), y tras el 2º avituallamiento, veo un descenso de los de soltar pierna e ir rápido. Me lanzo, pero no dura ná, ni un suspiro. Levanto la vista y… un cortafuegos; pues venga, con calma, que hace bochorno. Arriba ya estábamos cerca de la civilización, así que sólo faltaban unos caminitos que picaban un poquito, cruzar por asfalto una aldeíta, y volvíamos a la zona rápida del inicio… sólo que ahora ya no había muchas fuerzas, así que se hizo como se pudo. Aunque podía haber apurado más, porque llegando al pabellón me vacié, en medio pique con JL, y resulta que aún tenía dentro más de lo que pensaba. Por cierto, que en meta me enganché con la alfombra verde que pusieron, y casi caigo de morros: hubiese sido una entrada triunfal.
En fin, carrera con dos tramos muy rápidos y fáciles (lo que no me va muy bien), una zona técnica por el río (que ya me gusta más), y unos tramos cortos de subida a cachón (en los que me arrastro como la mayoría). En conjunto estaría bien, si no fuese porque al principio había demasiado asfalto, y porque se echó de menos alguna cinta más, pues en muchos cruces dudabas y a veces no sabías si te habías perdido.
Pero bueno, como siempre, lo que cuenta es estar otra tarde más metido ahí en el monte: 2:04:20, casi 20km con 610mDa+, zonas chulas, sin hacernos daño, y pasándolo bien. Así que: sin problema.
Por cierto, que al final entregaron las camisetas a los que terminamos las 7 pruebas del circuito de este año (ya soy 200% GMTA!). También hubo la entrega de trofeos tanto de la prueba como de la general del circuito, y si alguien me ve en las fotos del pódium que no se asuste: subí por encargo a recoger los trofeos de AV, que sigue yendo como una moto.

Imágenes de la web de GMTA y de las galerías de Safardatxo y Anika ofrecidas den CeG.